martes, 18 de diciembre de 2012

Excelente película sobre Bullying o Acoso Escolar



A continuación, pueden ver una excelente película sobre el bullying o acoso escolar. Esta película debería ser observada y analizada por:

-Padres

-Profesores, educadores y maestros de institutos, colegios y escuelas

-Las propias víctimas del bullying

-Toda persona que quiera colaborar en evitar o resolver este problema que afecta a miles de jóvenes diariamente.


Hugo Chávez Frías tiene un rabdomiosarcoma metastásico según doctor José Rafael Marquina: Un comentario según la Nueva Medicina Germánica:


Es bien conocido que el Presidente de Venezuela, Hugo Chávez Frías, padece de cáncer y que está siendo tratado en Cuba.

Oficialmente, se ha dicho que el presidente padece de un "cáncer abdominal", pero no se ha especificado exactamente qué tipo de cáncer es, y en qué órgano concreto del cuerpo surgió ese cáncer.

Sin embargo, diversas fuentes extraoficiales han pasado información, colada del entorno del Presidente, y han ofrecido detalles de su enfermedad.

Probablemente la fuente extraoficial más confiable es la del Dr.José Rafael Marquina, quien en su cuenta personal de twitter, diariamente informa sobre los detalles de la enfermedad de Chávez y de su tratamiento, ya que Marquina tiene fuentes en Cuba que le pasan la información.

En los siguientes videos, publicados recientemente, el Dr.Marquina ofrece detalles sobre el tipo de cáncer que padece Hugo Chávez, los errores cometidos en su tratamiento, y el pronóstico médico desfavorable en esa enfermedad:



Según Marquina, Chávez tendría un cáncer llamado rabdomiosarcoma, que comenzó en la cadera, pero que ya ha hecho metástasis en el hígado, la suprarrenal y en la columna vertebral, estando ya la enfermedad en un estado terminal. 

El rabdomiosarcoma es un cáncer que empieza en los músculos adheridos a los huesos, es decir, es un cáncer muscular.

Leyendo las "Tablas de la Nueva Medicina Germánica" del Dr.Hamer, el cáncer muscular se debe siempre a un conflicto biológico de moderada desvalorización de sí mismo. Cuando el conflicto se encuentra activo, hay una necrosis o pérdida de sustancia celular en la musculatura. Pero una vez resuelto el conflicto, se produciría un relleno de esa necrosis mediante una fuerte proliferación celular o tumoración que es precisamente lo que se conoce como "sarcoma", siendo el rabdomiosarcoma simplemente una especie dentro del género de sarcoma.

Según esto, Chávez habría padecido tal conflucto, y lo habría resuelto, momento en el cuál aparecería su enfermedad. Esto parece paradójico, pero encuentra pleno sentido en la teoría de Hamer.

Más información sobre la teoría de Hamer, puede encontrarse en este enlace.

domingo, 2 de diciembre de 2012

Entrevista con el biólogo Daniel Heredia Doval sobre biología evolutiva, neo-Darwinismo o teoría sintética de la evolución y temas afines




A continuación, presento una extensa entrevista con el biólogo Daniel Heredia Doval sobre biología evolutiva, que espero sea del provecho de todos los estudiosos, estudiantes, investigadores y público general interesados en la biología, la evolución y las ciencias de la vida. Agradezco a Daniel su gentileza en responder detalladamente todas las preguntas planteadas. Espero que los lectores disfrunten la entrevista.

1-Daniel, ¿puedes decirnos un poco sobre tu formación académica y qué te motivó a interesarte por el estudio científico de la naturaleza y los seres vivos?

Soy licenciado en Biología por la Universidad Autónoma de Madrid. En 2009 comencé mis estudios de doctorado en dicha universidad bajo la dirección del Dr. Máximo Sandín. En la actualidad me encuentro finalizando mi tesis doctoral, en la que argumento sobre la necesidad de un cambio de paradigma en Biología y en la que propongo nuevos enfoques y herramientas (categóricas, técnicas y metodológicas) que surgen de la integración de la teoría de sistemas y las ciencias de la complejidad con las ciencias biológicas, en una síntesis que pretende unificar los principales planteamientos heterodoxos para responder a las principales carencias del neodarwinismo, y que coloco bajo la etiqueta de Biología Evolutiva de Sistemas.

También soy coordinador de BiVOS, Grupo de Estudios Teóricos en Biología Evolutiva de Sistemas, una plataforma formativa y divulgativa formada recientemente en torno a este área emergente. Toda la información referente a los objetivos y las actividades de BiVOS está en su página web, así como noticias y ensayos relevantes.

Respecto a mi interés por el estudio de la naturaleza, este me viene desde niño. Con solo trece años ya tenía claro qué quería estudiar en un futuro, y me pasaba las tardes entre libros de divulgación y documentales de naturaleza. Podría decir que es un interés vocacional, aunque reconozco que este sentimiento a venido reforzado por la buena influencia de familiares, compañeros y profesores con la misma pasión.


2-Para entrar en materia, quizás cierta precisión terminológica sería apropiada. En los libros sobre biología, he encontrado que el término "evolución" se emplea para referirse a muchos conceptos, entre los cuáles se encuentran "descendencia con modificación", "especiación", "adaptación", "cambio en la frecuencia de los fenotipos prevalecientes en una población", "tesis del ancestro común", "cambios de organización" etc., y tal diversidad tiende a generar una fuerte confusión terminológica y conceptual. ¿Podrías aclararnos que significan cada uno de estos conceptos y a cuál de ellos se refiere el término "evolución"?

Si, tal como apuntas, uno de los más graves lastres de la Biología Evolutiva es la falta de una definición clara y concisa de muchas de las categorías con las que se trabaja,  incluyendo los sujetos y objetos de estudio, así como una distinción concisa entre los mecanismos, los procesos, los fenómenos y las dinámicas que entrarían dentro del estudio de la evolución.

Los términos incluidos en el apartado hacen clara referencia al aparato conceptual de la síntesis neodarwinista, aún sin aparecer de forma explícita el concepto de selección natural. La descendencia con modificación es una condición necesaria en la evolución (llamémosla creatividad intergeneracional), pero no definitoria, dado que los procesos evolutivos implican una homogenización poblacional que establezca una dirección, y esto no queda descrito en la sentencia anterior. Por supuesto, el punto de vista convencional es aplicar a esta “descendencia con modificación” un “agente selectivo” que determine la dirección de los cambios, aunque esta no es la única forma (ni a mi juicio la más coherente) de explicar la homogeneización de los cambios en las poblaciones.

Los términos “especiación” y “adaptación” hacen referencia a dos cuestiones clásicas en Biología Evolutiva. La especiación es la formación de una nueva especie a partir de otra precursora. Hasta aquí todo es bastante claro. Lo realmente problemático es definir con pulcritud qué es (si es que es algo) una especie y cuando una población adquiere esta categoría taxonómica, dado que existen varios criterios y abundantes excepciones. Respecto a la “adaptación”, yo la definiría como el fenómeno inherente de coherencia ecológica entre los sistemas biológicos en, y con, su medio. Por supuesto existen otras definiciones “oficiales” que involucran otros conceptos y que se centran en la composición poblacional (“cambio en la frecuencia de los fenotipos/genotipos prevalecientes”), pero de nuevo, estas suelen hacer uso del aparato neodarwinista (eficiencia biológica, reproducción diferencial, etc.) que yo personalmente excluiría por las razones que expongo más adelante.

La “tesis del ancestro común” no es sinónimo de evolución. Es una de las múltiples (y no siempre coherentes entre sí) propuestas de Darwin en su obra “El origen de las especies”, y por lo tanto no es dominio del hecho evolutivo sino de la teoría darwinista de la evolución. La idea de un ancestro común es coherente dentro de un esquema de filogenia arborescente como el planteado por el darwinismo, pero no necesariamente cierta. De hecho algunos autores, como Carl Woese, no hablan de un último ancestro común, sino de una población inicial (progenote) marcada por el consenso genético y unas altas tasas de transferencia horizontal, siendo esta una alternativa coherente y perfectamente plausible en vistas de la argumentación ofrecida.

Respecto a los “cambios de organización” nos encontramos con un problema similar al de la “especiación”. Este criterio, aun siendo muy interesante, carece de sentido en ausencia de una definición clara y concisa de qué es una “organización” en la biología moderna. Lo más explícito a citar serían los clásicos bauplan (planes de organización) de los principales grupos de animales, si bien esta referencia sigue sin dar una definición concreta y universal. De nuevo, volvemos a encontrarnos en un gran vacío categórico. En mi opinión, es urgentemente necesario definir correctamente este y otros términos para poder operar con una definición correcta de “Evolución” y abarcar nuevas direcciones en biología evolutiva.

Aunque puedo dar una definición “oficial” o “extraoficial” para cada uno de estos términos, esto no quiere decir que todos ellos sean adecuados para incluirse a su vez en la definición del término “Evolución”.  Considero que éste debería hacer referencia únicamente al “fenómeno de cambio en la organización de los sistemas biológicos en el tiempo, a través de mecanismos naturales”, sin una referencia directa a las teorías e hipótesis que tratan de explicar dicho fenómeno o los mecanismos implicados. Eso sí, lo que es ineludible es formular claramente todos y cada uno de los elementos de esta definición, lo cual ya se saldría de esta entrevista.


3-¿Qué se entiende por darwinismo (o neo-darwinismo) y teoría sintética de la evolución?

Darwinismo es una corriente evolucionista cuyo origen se atribuye a Charles Darwin, quién publicó sus ideas acerca de la variación y “supervivencia de las razas más favorecidas en la lucha de la existencia” en su entonces polémica obra “El origen de las especies” (1859) [1]. La idea fundamental del darwinismo, su núcleo teórico, es que la competencia por los recursos limitados lleva a una situación mantenida de supervivencia y reproducción diferencial dentro de las poblaciones, de manera que los individuos más competentes y mejor adaptados dejan descendencia mientras el resto pasa a ser parte de la historia. Dado que las características ventajosas de estos individuos “virtuosos” se heredan, su descendencia vuelve a obtener una ventaja en las mismas condiciones, lo cual lleva finalmente a un remplazo de la población y a la homogeneización de estos caracteres. En esencia de lo que se trata es de una quimera del pensamiento poblacional de Malthus y del liberalismo de Adam Smith “aplicada al conjunto de los reinos animal y vegetal”.  Esta idea de “supervivencia de los más aptos” es lo que se ha denominado sin demasiada formalidad (como el propio Darwin reconocía) como “Selección Natural”. Es importante señalar, no obstante, que el darwinismo clásico contenía otros elementos fundamentales e indisolubles para Darwin: gradualismo, uniformismo, adaptacionimo, ancestro final único, variabilidad individual no finita y filogenia arborescente (no reticular). A lo largo de los años y de las revisiones, Darwin introdujo otras ideas externas (Lamarck, Geoffroy Saint-Hilaire, Von Baer) es su constructo teórico, en buena parte como respuesta a las críticas recibidas desde el colectivo científico de la época, y que en mi opinión añaden buena carga de incoherencia a sus postulados iniciales sin resolver realmente dichas críticas: herencia de caracteres adquiridos por acción directa (respuesta orgánica) e indirecta (nicho formativo) de las condiciones del medio, teoría de la pangénesis, etc. En síntesis, según el propio Darwin, el darwinismo clásico podía resumirse en una serie de leyes que son: “la de crecimiento con reproducción; la de herencia, que casi está comprendida en la reproducción; la de variación por acción directa e indirecta de las condiciones de vida y por el uso y desuso; una razón del aumento tan elevada, tan grande, que conduce a una lucha por la vida y como consecuencia a la selección natural, que determina la divergencia de caracteres y la extinción de las formas menos perfeccionadas”.

Respecto al neodarwinismo, podemos considerarlo como una purificación de las proposiciones del darwinismo clásico que rechaza la pangénesis y la herencia de caracteres adquiridos, al tiempo que considera que la fuente de las variaciones se encuentra en el “plasma germinal” (gametos) que es ajeno a las modificaciones somáticas y a las señales que éste recibe del medio. Su formulación se atribuye fundamentalmente a August Weissman, quién se ha hecho célebre a partir de sus experimentos en los que mutilaba el rabo a ratas de laboratorio para falsar la herencia de esta “modificación”. Aunque a día de hoy pueda resultar sorprendente, no es de extrañar que estos experimentos no tuviesen una gran aceptación en su época, dado que difícilmente puede considerarse una mutilación como un carácter adquirido, y de hecho el neolamarckismo se consolidó y continuó siendo una corriente importante durante varias décadas posteriores. En cualquier caso, creo que en neodarwinismo puede ser definido sin problemas como una teoría que reconoce a la selección natural como el único “mecanismo” capaz de producir la evolución (gradual) de los seres vivos.

Por último, la síntesis moderna (también llamada teoría sintética o síntesis neodarwinista) puede considerarse como la unificación de la teoría neodarwinista y la teoría mendeliana de la herencia bajo la forma de la genética de poblaciones, iniciada por Fisher, Write, Haldane y Dobzhansky, y que finalmente se extendería a otras ramas clásicas de la biología como la paleontología (Simpson) o la zoología (Mayr, Huxley), y finalmente al conjunto de las ciencias de la vida. La síntesis incorpora la genética como base de la evolución, otorgando a las mutaciones espontáneas y “azarosas” el papel de “fuente primaria de variación” y tomando las segregaciones mendelianas como fundamentación de los procesos de la herencia. La selección natural es la encargada (en sentido metafórico) de generar una reproducción diferencial basada en la expresión de los caracteres codificados determinísticamente en los genes y la supervivencia de los individuos con estas variantes (alelos) más adecuadas. Como consecuencia se da un “cambio en las frecuencias alélicas de la población” que favorece a los individuos con mayor “eficacia biológica”. Tal como ocurría con el neodarwinismo, la síntesis rechaza cualquier influencia del ambiente en la variación del material (genético) de partida, en frecuencia y posición (asociado al neolamarckismo), así como el cambio saltativo (mutacionismo) y las tendencias internas (ortogénesis). No obstante, a diferencia de éste, la síntesis considera que existen otras procesos evolutivos secundarios (de genética de poblaciones) que se escapan a la selección natural y que entran dentro de la deriva genética.

Sin embargo, como cualquier neodarwinista moderno podrá ratificar, existen numerosas excepciones, vacíos y ampliaciones al modelo original de la síntesis. Tantas que algunos lo consideramos absolutamente insostenible a día de hoy.



4-¿Puede resumirse la teoría darwinista actual de la evolución como adaptacionismo más continuismo?

No. Este sería un resumen deficiente ya que sólo define parte de la teoría. De hecho, el concepto de continuidad ni siquiera es patrimonio del darwinismo, sino que es una de las tesis centrales del evolucionismo per se. Con independencia del ritmo y el modo en el que se den las transformaciones, el evolucionismo sostiene que la biodiversidad a través de los tiempos es producto de una continuidad biológica que se opone a la aparición de novo de formas sin ningún tipo de conexión filogenética (ya sea vertical u horizontal) como explicación axiomática. Respecto al adaptacionismo, ciertamente esta es una característica del darwinismo, ya que elimina explícitamente la posibilidad de tendencias internas (ortogénesis y tendencia a la complejidad) y minimiza el efecto de fenómenos no adaptativos (estructuralismo y neutralismo) en la dirección de los cambios evolutivos, que responden fundamentalmente a un ajuste de las características de los seres vivos al ambiente cambiante. Sin embargo el adaptacionismo también es un componente clave del neolamarckismo clásico (1860-1930), aunque como es fácil de entender los mecanismos propuestos son diametralmente opuestos.

Si tuviese que resumir el pensamiento darwinista en una ecuación simple, esta sería la siguiente: individualismo más competencia igual reproducción diferencial. Por individualismo contemplo la singularidad única de cada individuo y de sus variaciones, mientras que por competencia incluyo las relaciones de exclusión entre individuos potencialmente viables por el acceso a un recurso dado. Las dos condiciones son estrictamente necesarias para que se de el único proceso de transformación poblacional que contempla el darwinismo. Entiendo que es esta simple fórmula contiene la esencia de lo que se designa como evolución por selección natural, y por ende, la esencia del darwinismo.


5-¿Cuál es la unidad básica de la evolución? Es decir, ¿qué es exactamente lo que evoluciona: los genes, los organismos, las poblaciones, las especies o todos ellos?

Bueno, aquí hay opiniones para todos los tipos. Algunos autores tienen una respuesta fácil, rápida y aparentemente contundente al problema: todas son unidades seleccionables y por tanto sujetos de la evolución. Establecemos una teoría jerárquica de la evolución por selección natural (Gould 2004) y todos contentos.

En buena parte, esta diversidad es producto de unas definiciones bastante laxas (por no decir incompletas o ilógicas) de todas estas categorías, así como del paradigma neodarwinista que pone énfasis en la individualidad y la selección competitiva. Creo que es necesario partir de una definición formal de los sujetos y objetos a estudiar en Biología Evolutiva. En esto consiste una parte importante de mi tesis, pasando por un cambio de enfoque hacia la Biología Evolutiva de Sistemas.

6-También he encontrado en la literatura una sorprendente flexibilidad en torno al concepto de "azar", tal como se usa en la teoría sintética para las mutaciones genéticas. Algunos autores definen el azar como " a-causal, sin causa alguna", otros como  "lo que es impredecible" (lo cuál puede representar simplemente una limitación cognitiva del ser humano para predecir eventos que en el fondo sí tienen causas reales), otros como "independientemente de que sea útil o no al organismo". Todos estos conceptos de azar son diferentes e implican cosas diferentes, es decir, no son equivalentes. En tu opinión, ¿qué significa realmente, en la teoría sintética, que las mutaciones genéticas sean "al azar"? ¿Hay alguna evidencia científica a favor de esa idea?

Lo que entiendo por azar en la síntesis moderna es el antagonismo a la modificación del material hereditario inducida por el ambiente. Es la negación de un papel activo de los individuos en su propia evolución y la reciprocidad no-lineal entre organismo y medio. En esencia, es la exorcización del lamarckismo, del evolucionismo primigenio. Y existen muy buenas razones para que los neodarwinistas (a diferencia de Darwin) se opusieran frontalmente a las tesis lamarkistas. El lamarckismo contempla un tipo de evolución no selectiva, coordinada, que induce una transformación de las poblaciones a través de los individuos que cambian al unísono. El proceso de  homogeneización está implícito en el mecanismo de cambio. La selección no solo es innecesaria, sino que es imposible. En consecuencia, la variación azarosa e individual es una imposición  lógica del darwinismo.

Aunque la genética del siglo XX se construyó en gran parte en base a unas premisas de cambio azaroso y una expresión unidireccional de la información (Dogma central de la biología molecular), lo cierto es que numerosas evidencias apuntan justo al lado contrario. No solo está más que demostrado que los procesos de mutación suelen estar asociados a lesiones del DNA, siendo los organismos los responsables de su aparición a través de los mecanismos de reparación bioquímica, quedando patente que es el medio un agente inductor de cambios a un nivel nucleotídico. Existen un buen número de mecanismos de cambio molecular hereditario que están íntimamente relacionados con las condiciones del medio y las respuestas que los organismos desarrollan frente a estas. Estos cambios, que incluyen movilización de elementos móviles, recuperación de las capacidades infectivas de virus endógenos, transferencia horizontal de material genético y herencia epigenética de varias clases (marcas en la cromatina, proteínas tipo prión, estructuras autorreplicativas, etc.), y en todos ellos se puede observar un desequilibrio probabilístico de rango variable (desde especificidad muy alta hasta espectros de variación más relajados, pero en ningún caso puramente estocásticos) tanto en el su acotamiento temporal como posicional (loci) en función a desencadenantes ambientales específicos.

7-¿En qué consiste exactamente el concepto de "selección natural" en la teoría sintética?

Como indiqué en la respuesta a la pregunta 3, la selección natural es en la teoría sintética el “mecanismo” (por darle alguna categoría) capaz de modificar la distribución de las frecuencias alélicas, entendiendo que dichos alelos se han originado previamente por mutación al azar. Es por tanto el tamiz que filtra las mutaciones y el timón que dirige la evolución de las especies, a expensas del motor de las mutaciones, hacia los picos adaptativos. Es la mano invisible del mercado del mundo natural.


8-Los neo-darwinistas mencionan como ejemplos recientes del poder explicativo de la selección natural los siguientes: 1-El ejemplo del gusano de la mosca de la manzana, que originalmente se alimentaba solamente de las frutas del espino, pero que luego se adaptó a la manzana, y desde hace unos 100 años comenzó a convertirse en una plaga importante en Estados Unidos. 2-La resistencia por parte de cientos de especies de insectos a varios insecticidas químicos, que hace muy fuertes a dichos insectos y muy difíciles de controlar. 3-La resistencia a los antibióticos. ¿Estos procesos son una prueba del poder explicativo de la selección natural en los fenómenos biológicos y evolutivos?

En primer lugar, describir un fenómeno no es describir sus causas. Estos ejemplos, que a mi me conste, no son una evidencia de la selección natural sino del fenómeno de adaptación. Hoy sabemos que los mecanismos de adaptación epigenética y los efectos transgeneracionales pueden tener un alto potencial explicativo para algunos fenómenos adaptativos, especialmente los relacionados con la alimentación. Esta es otra posible explicación a, lo que insisto, es un la descripción de un fenómeno y no una prueba fehaciente de un mecanismo o proceso.

En lo que respecta a la cada vez más distribuida resistencia a antibióticos, parece que el principal mecanismo detrás de este fenómeno es la transferencia horizontal. No podemos olvidarnos que las circunstancias altamente nocivas o estresantes pueden detonar la potenciación de mecanismos transferencia y de hipermutación. La capacidad de sobrevivir a altas dosis (y resalto esta puntualización) de antibióticos gracias a la adquisición de paquetes de información genética con disponibilidad poblacional difícilmente puede ser invocado como prueba de la selección natural.


9-Muchos críticos del neo-darwinismo han argumentado que el concepto de "selección" es en sí mismo inadecuado y engañoso, porque presupone implícitamente un seleccionador (alguien que haga la selección o escogencia entre las opciones disponibles) y por ende de un agente mental o racional. Irónicamente, los darwinistas, son los primeros en negar la existencia de una agencia mental en el proceso evolutivo, pero continuamente emplean metafóras, terminos y ejemplos antropomórficos (que aluden a características humanas) en la naturaleza para apoyar su posición, tales como la idea de "El Relojero Ciego" o "El Gen Egoísta" y hasta "La Madre Naturaleza", y el propio Darwin basó su idea de la selección natural en la cría de animales domésticos, que es un ejemplo típico de diseño y selección inteligente, es decir, que involucra una mente racional que hace la selección o escogencia. En ninguna otra ciencia natural parece ocurrir una paradoja similar. En tu opinión, ¿por qué los biólogos neo-darwinianos, tan hostiles a cualquier idea de un diseñador inteligente en la naturaleza, hacen uso continuo y reiterado precisamente de metáforas, modelos, ejemplos y conceptos que presuponen implícitamente un diseñador o seleccionador con características humanas?

No soy sociologo ni historiador, así que no me encuentro en disposición de dar una respuesta realmente sólida. Supongo que existen varios factores. Uno importante debe ser la marca de inicio del propio darwinismo. La selección natural fue descrita como una metáfora. En realidad todo el “Origen de las especies” está plagado de especulaciones y anécdotas muchas veces inconexas. La visión de Darwin nunca fue sistemática (a diferencia de Lamarck), y eso creo que ha marcado unos precedentes hasta hoy en lo que se refiere al uso del lenguaje simbólico excesivo. En todo caso, también considero que el concepto de selección natural es en sí mismo una trampa semántica, ya que el hecho de seleccionar sugiere la necesidad de un seleccionador.


10-En las ciencias naturales las explicaciones son principalmente de tipo causal y legal, es decir, se busca un mecanismo causal incluido una ley natural que explique un fenómeno particular o conjunto de fenómenos. Así por ejemplo la rotación terrestre explicaría causalmente el fenómeno de la alternancia del día y la noche, y la rotación misma sería explicable por leyes físicas. En el caso de la biología de la evolución, el fenómeno a explicar es la evolución, y la selección natural se propuso originalmente como la explicación de ese fenómeno (al menos así lo afirman muchos biólogos actualmente). Sin embargo, para mi sorpresa, he escuchado a algunos darwinistas actuales proponer que  la selección natural no es la causa, sino el "efecto" de la supervivencia diferencial de los organismos dentro de las poblaciones (argumento que esgrime, por ejemplo, un darwinista en un debate que sostuvo con Máximo Sandín). Ahora bien, si la selección natural no es la causa sino el "efecto" de la supervivencia diferencial, entonces ¿cuál es la explicación científica que los darwinistas proponen como mecanismo causal y legal de dicha supervivencia diferencial? ¿Y que quedaría entonces del papel explicativo y casi omnipotente que juega la selección natural en la teoría sintética?

El problema es que, en mi experiencia, ni los darwinistas tienen demasiado claro qué es la selección natural. ¿Es un mecanismo? ¿Es un proceso? ¿Es un principio? ¿Es una consecuencia? Aunque la he visto citada como todo esto, la selección natural no entra realmente en ninguna de estas categorías. La selección natural es un término confuso que ni siquiera Darwin usaba de forma concreta. Tal como resalta Wallace en una de sus cartas al mismo, éste usa el término con dos sentidos distintos: “(1) para la simple preservación de las variaciones favorables y la eliminación de las desfavorables, en cuyo caso es equivalente a “la supervivencia del más apto”; y (2) para el efecto producido por dicha preservación”. Por lo tanto, este es un problema de base.

Creo que realmente la mayoría de los darwinistas nunca se han planteado esta cuestión. Probablemente muchos se llevarían una buena sorpresa al ver que sus cimientos son tan poco sólidos y absolutamente insostenibles desde un punto de vista epistemológico como el que planteas.


11-Una objeción común al neo-darwinismo es que el registro fósil no contiene los millones de formas transicionales que cabría esperar si la teoría sintética fuese correcta. Los Darwinistas típicamente responden con, al menos, tres argumentos: 1)El registro fósil no es perfecto; 2) Es muy difícil encontrar los fósiles (el punto 1 y 2 explicaría la ausencia de muchas de esas formas intermedias en el registro fósil conocido) y 3)Sí se han encontrado formas intermedias o transicionales tales como el "Archaeopteryx", que es una transición entre los reptiles y los pájaros modernos. ¿Qué opinas de esta respuesta neo-darwiniana? ¿Es adecuada para responder a las críticas contra el neo-darwinismo basadas en el registro fósil?

Las dos primeras son ciertas. Pero con importantes matices. Evidentemente el registro fósil no contiene todas restos de todas las formas de vida pretérita y es lógico que existan vacíos de conocimiento, dado que gran parte del material se pierde por los procesos tafonómicos. Del mismo modo, los fósiles no se encuentran distribuidos por doquier, es decir, existen ciertas dificultades para encontrar material paleontológico. Pero el diablo vive en los detalles, y he aquí como los matices son cruciales. En primer lugar, dado que asumimos que el registro es imperfecto, la pregunta siguiente es si éste es “representativo”, es decir, si aún con sus carencias refleja una parte suficientemente importante de la evolución de la vida como para poder hacer generalizaciones. Y los estudios de las últimas décadas indican que si lo es. Y en segundo lugar, aunque los fósiles no se encuentran fácilmente en cualquier lugar, existen lugares en los que se encuentran fácilmente. Los grandes yacimientos paleontológicos (como Burguess Shale) ofrecen un registro bastante detallado de los ecosistemas antiguos. Del mismo modo, también hay grupos cuyo registro es considerablemente bueno, y es posible tener un reflejo bastante nítido de la evolución de estos organismos. Curiosamente, ambos tipos de registro favorecen la teoría del equilibrio puntuado, que se opone al gradualismo filético propio del darwinismo al tiempo que ofrece una observación que es fácilmente absorbible por fenómenos de evolución rápida y saltativa concentrada en períodos cíclicos.

Respecto a las formas transicionales se pueden hacer varios comentarios. Primero, la existencia de una continuidad es algo esperable de un registro evolutivo con independencia del tiempo y los mecanismos que hayan estado implicados en el mismo. Lo sorprendente sería no encontrar ningún tipo de relación entre organismos, pues esto diría mucho en contra de la realidad de la evolución como hecho. Lo que se pone en duda no es la existencia de conexiones filéticas entre fósiles, sino los mecanismos y los procesos por los cuales se ha originado esa relación. Dado que no podemos viajar en el tiempo, no podemos inferir gran cosa sobre esto último. Lo que podemos cuestionar, y cuestiono, es la gradualidad y la velocidad de estos cambios, dado que en caso de que los cambios evolutivos tuviesen un recorrido primordialmente gradual el número de fósiles transicionales excedería con creces al de las morfoespecies estables, cosa que no ocurre. Y segundo, creo que buena parte de la interpretación de los “eslabones perdidos” está sujeta a una preconcepción del resultado. Por ejemplo, la evolución de los tetrápodos ha sido sistemáticamente descrita como una serie gradual (pasando por Panderichtys, Tiktaalik, Acanthostega e Ichtyostega) en la que se iban introduciendo los nuevos fósiles de manera conveniente a la predicción gradual del modelo teórico. Sin embargo, muy recientemente esta reconstrucción preconcebida ha resultado sólidamente refutada debido a las incoherencias temporales entre estos fósiles, sus reconstrucciones biomecánicas e icnitas de marcha cuadrúpeda dejadas por un organismo indeterminado que preceden a todos los restos óseos de la serie ideal. Esto indica una situación de solapamiento temporal entre todas estas formas que en ningún caso obedece a una relación filogenética lineal y gradualmente ordenada.


12-Para formular y entender correctamente la siguiente pregunta, me gustaría que los lectores de esta entrevista analicen los gráficos siguientes sobre el reino animal y algunos de sus filos y subfilos:



 
Basado en la anterior clasificación, algunos críticos del neo-darwinismo sostienen que, aún si fuesen aceptables como evidencia científica los típicos ejemplos de evolución y las formas transicionales que proponen los darwinistas (por ejemplo, las transiciones entre los reptiles y los pájaros, la evolución del caballo, etc.) tales ejemplos constituirían meras trivialidades en comparación con lo que la teoría sintética tendría explicar mediante la selección natural y las mutaciones al azar. Tales ejemplos (la evolución del caballo, por tomar un caso), típicamente, son casos de evolución dentro de un mismo filo o subfilo (ej: los vertebrados), que es prácticamente insignificante en comparación con el árbol completo de la vida. La pregunta es: ¿No está la teoría evolutiva actual basada en una inmensa e injustificada extrapolación de una parte mínima de la realidad biológica a todo el inmenso conjunto de la vida? ¿Por qué tienen tanta confianza los darwinistas en el poder explicativo de la selección natural, cuando la evidencia científica disponible actualmente sólo explica, como máximo, una muy minúscula parte del inmenso arbol de la vida? ¿Qué evidencia científica sólida hay, por ejempo, de que un murciélago y una esponja de mar hayan evolucionado por selección natural y mutaciones al azar a partir de un ancestro común?

Realmente lo primero que habría que comentar es que la iconografía del árbol de la vida no es sostenible por más tiempo, al menos según nos indican los datos moleculares. En realidad, las nuevas filogenias contienen un profuso número líneas horizontales, que responden a fenómenos de hibridación, reticulación introgresiva, transferencia horizontal y adquisición de virus y elementos móviles. Estas relaciones filogenéticas de carácter no vertical se dan a lo largo de todos los reinos, desde las bacterias a los primates. De hecho, en el primer caso, el volumen de material genético que ha sido sujeto de transferencia horizontal en algún momento supone más de un 80% de media de los genomas procariotas. En el segundo ejemplo, por solo citar un par de ellos, se han encontrado evidencia de hibridación entre géneros de primates, dando lugar a especies híbridas, así como por supuesto la entrada puntual de nuevos elementos móviles por transferencia horizontal e inserciones retrovirales en los genomas del grupo. Y esto no es ninguna excepción. En algunos grupos, como las angiospermas, la reticulación y la hibridación son por el contrario la norma. Esto ha llevado a redibujar el esquema de la vida, no de una forma arborescente como la de las heráldicas que recoge el darwinismo, sino como un tapiz entretejido con unas líneas maestras (las relaciones de herencia vertical) y infinidad de hilos que lo cruzan (las relaciones de herencia horizontal).

A partir de este punto es fácil ver que las filogenias más modernas no se ajustan a las predicciones del darwinismo. Si a esto incorporamos la naturaleza puntuada y los saltos del registro fósil el panorama no puede ser más distinto. Para mas inri, los ejemplo de transición gradual no son todo lo claros que debieran. Ya he expuesto el problema en la respuesta a la pregunta anterior, pero podemos dirigirla al ejemplo concreto de la “evolución del caballo”. La secuencia de fósiles en esta filogenia no es realmente lineal, sino que se trata de una ordenación ideal de estadios entre restos que no mantienen una relación temporal equivalente. Es una reconstrucción ideal. Por lo tanto, no es sólo que el darwinismo esté extrapolando un ejemplo minoritario a la totalidad del registro fósil, sino que ese ejemplo es una construcción teórica. Las razones de esa confianza absoluta en el poder de la selección me son ajenas, aunque sospecho que tienen que ver con el “adoctrinamiento” en el proceso formativo de los biólogos, la inercia de los paradigmas científicos y el refuerzo (positivo y negativo) que recibimos desde el resto del colectivo científico, laboral y socioeconómico.

En todo caso, del mismo modo que exponía en la respuesta anterior, no se pueden tomar los restos fósiles como prueba de los mecanismos evolutivos, tan solo de los fenómenos. A partir de ahí se debe encontrar una coherencia entre la teoría y las pruebas históricas, pero esta relación no es bidireccional. No hay ninguna prueba de que las esponjas y los murciélagos hayan evolucionado por selección natural, porque no existe un registro demográfico del proceso. Lo más que podemos hacer es complementar las pruebas paleontológicas con datos neontológicos (moleculares y anatómicos) para tratar de obtener pistas sobre los mecanismos moleculares de cambio implicados en el fenómeno. De nuevo, aquí tampoco encontramos una prueba de la selección natural en sí. Lo que podemos observar es que la mutación puntual sobre los “genes”, las secuencias codificantes de proteínas que se encuentran en el motor de la síntesis moderna, no pueden explicar la evolución de estos organismos debido a la extensa homología y la falta de innovación en estas secuencias que se encuentra a lo largo de las comparaciones filogenéticas desde el hombre hasta las esponjas. Por el  contrario existen claras evidencias de la importancia otros mecanismos como la reordenación de los cromosomas, la duplicación de genomas y secuencias genéticas, la adquisición de material genético foráneo y la reorganización física y funcional de la información por medio de elementos móviles.

13-Otra objeción contra el neo-darwinismo es que la idea original de "la supervivencia del más apto" es tautológica, es decir, es una afirmación verdadera en virtud solamente de su forma lógica pero vacía de contentido empírico y predictivo, porque se define a los más aptos como aquellos que "sobreviven" (o dejan más descendencia) y a los que sobreviven (o dejan más descendencia) como aquellos que son más aptos. Muchos darwinistas se han dado cuenta de este problema, y han reformulado la idea diciendo que la seleccion natural es realmente una diferencia en el éxito reproductivo, concepto que incluye tanto la habilidad de sobrevivir hasta la edad reproductiva como la capacidad de reproducirse. ¿Qué opinión te merece esta reformulación darwinista?

Bueno, es una salida por la tangente, pero en el fondo no deja de ser una definición tautológica maquillada y, como ya he comentado, mal planteada. Dado que este es un problema de base (la inexactitud categórica y terminológica del darwinismo) hemos llegado a una situación en la que podemos jugar a nuestro antojo con las definiciones, hasta el punto de darle a la selección natural el carácter que nos parezca más oportuno según las necesidades a cubrir.

Por otra parte, esta formulación sigue sin satisfacer ni siquiera las bases de lo que entiendo por pensamiento darwinista, dado que “una diferencia en el éxito reproductivo” puede darse por factores ajenos a la selección competitiva, a través de sesgos de viabilidad (restricciones facultativas) e incluso por pura contingencia.

En cualquier caso, creo que el término selección natural es un pesado lastre para la biología y tratar de definirlo es tan innecesario como improductivo, tanto por su inexactitud como por su falta de contenido.


14-También se ha criticado al neo-darwinismo que, como teoría, no tiene capacidad predictiva. Pero los darwinistas responden que sí tiene capacidad predictiva, y que eso se resume en la siguiente predicción: en un contexto ambiental específico, un genotipo va a ser más exitoso que otro en su supervivencia o en su reproducción por razones que tienen que ver con el medio ambiente o con los otros organismos dentro de la población. ¿Qué opinas de esto?

Ciertamente, no tiene capacidad predictiva. Esto ha sido admitido al menos por algunos biólogos darwinistas, como Conways Morris, y no deja de ser una limitación importante para una teoría científica. Por supuesto, gran parte del material de estudio de la evolución es de carácter histórico (fósiles, filogenias moleculares, anatomía comparada, etc.) lo que llevan a un análisis a posteriori y a la idea de que “la biología evolutiva es una ciencia histórica”. El darwinismo tan sólo ofrece predicciones muy vagas (por llamarlas de algún modo) al adjudicar el origen de las analogías a las presiones selectivas del ambiente.

No obstante, mi impresión personal es que la evolución obedece a mecanismos,  procesos y dinámicas científicamente describibles, y estas deben de ser descritas y estudiadas por la Biología Evolutiva. A partir de aquí podríamos hablar de fenómenos de cambio probabilísticamente predecibles. Y digo probabilísticamente porque al hablar de sistemas complejos (como son los sistemas biológicos) entramos frecuentemente en el dominio del caos. Sin embargo, aún en sistemas de este tipo es posible obtener resultados de carácter probabilístico con cierta capacidad de predicción, algo que supera con creces las aportaciones actuales de la síntesis.

Respecto a la supuesta capacidad predictiva que enuncias, bueno, no me parece que esto pueda llamarse como tal. Es una explicación a posteriori, y una tesis no falsable ni demostrable, no una predicción. De hecho, me gusta exponer este problema con un ejemplo culinario. Imaginemos que se tiene un conjunto de peras y manzanas en un momento inicial t=0, con iguales proporciones. Ahora saltemos hasta un momento temporal posterior, t=1, y recontemos la proporción de cada fruta. Lo cierto es que no importa si sólo quedan manzanas o peras, en cualquier caso podemos afirmar que han sobrevivido los más adecuados frente a un agente selectivo (en este caso un humano hambriento). Pero lo más interesante es que, aunque queden manzanas y peras en proporciones variables, siempre podemos afirmas que las que quedan son las más adecuadas de entre su tipo. Lo que quiero ilustrar con este ejemplo tan básico es que, a posteriori, es fácil ajustar los resultados a “las predicciones de la teoría”, cuando la única predicción es la supervivencia de los mejor adaptados. La supervivencia no es el cambio y por lo tanto no es una explicación de base a los fenómenos evolutivos.

15-En su libro "What Darwin Got Wrong", el filósofo y científico cognitivo Jerry Fodor y el biólogo molecular Massimo Piattelli-Palmarini (ambos materialistas, ateos y anti-creacionistas) afirman que la teoría sintética de la evolución no es una teoría científica, sino una forma de narrativa histórica. A diferencia de las teorías científicas, que predicen un fenómeno concreto basado en leyes naturales, la teoría sintética de la evolución es más bien una reconstrucción, a posteriori, de cómo los organismos se pudieron haber adaptado mediante la selección natural. ¿Compartes esta opinión?.

Absolutamente. Creo que esto resume a la perfección lo que quería transmitir en la respuesta a la pregunta anterior.


16-¿En qué consiste el nuevo modelo teórico que biólogos innovadores como tú proponen y qué ventajas tiene en relación con la teoría sintética?

Actualmente no son pocos los biólogos que encuentran una importante insatisfacción con la síntesis moderna y buena parte del aparato teórico que implica (determinismo genético, linealidad, totipotencia de la selección natural, gradualismo, mendelismo, etc.) Esto nos sitúa en un momento tan interesante como caótico (en el sentido tradicional) donde existen varias proposiciones inconexas que vienen a remendar las carencias de la síntesis a través de ampliaciones y de la inclusión selectiva de excepciones. Estos modelos amplían el estrecho cerco de la síntesis moderna por medio de la epigenética, la genómica, la biocomputación, la microbiología y la embriología, por citar algunos campos, pero sin modificar el núcleo teórico del darwinismo. Sin embargo, estas visiones no están integradas entre sí y arrastran todos y cada uno de los lastres conceptuales del darwinismo que he ido exponiendo a lo largo de la entrevista. Esto en mi opinión, y en la de otros científicos con mayor recorrido que el mío, esto es un error. No vale con remendar el darwinismo, hay que reformular la Biología Evolutiva desde un enfoque teórico diferente que sea capaz de dar una explicación coherente a los principales problemas de la síntesis sin perder poder explicativo para el resto de fenómenos descritos.

Siguiendo esta línea, a mi juicio la alternativa más potente planteada hasta la fecha, tanto por su capacidad explicativa como por su monumental cambio de concepción hacia la biología, es la “Teoría de la evolución por integración de sistemas complejos” de Máximo Sandín.

Máximo Sandín rechaza y critica abiertamente al darwinismo en su aspecto científico y en su nefasta influencia social, propone una visión alternativa de la vida y de la evolución que, en contraste con competencia radical de la síntesis, se basa en la integración de sistemas vivos. La adquisición, la modificación y la compartición de la información contenida en, y a través de, bacterias y virus – sistemas biológicos más básicos – por parte de otros organismos y entre sí, son los principales procesos que originan la novedad evolutiva. La transferencia horizontal, la endosimbiosis y, muy especialmente, las dinámicas de los virus y secuencias afines  son, para Sandín, los últimos responsables de los cambios de organización que se observan en el registro fósil, de carácter puntuado, que se producen con cierta periodicidad y a continuación de las extinciones en masa. Estas extinciones han sido asociadas por varios autores con momentos de profunda crisis medioambiental, y Sandín considera que estas crisis no solo constituyen un sesgo sobre la biodiversidad, sino también un detonante para la innovación. La desestabilización profunda del medio puede inducir la movilidad de los elementos móviles del genoma y de los virus endógenos, así como  potenciar la transferencia horizontal, y remodelar los ecosistemas de manera rápida a través de cambios en las especies de carácter saltacionista. Estos cambios, en consecuencia a las dinámicas de estos mecanismos, no son azarosos, sino fuertemente limitados y dirigidos, y son responsables de la aparición paralela de caracteres homólogos entre individuos de la misma especie, e incluso, entre especies distintas. El cambio evolutivo, por lo tanto, es presentado por Sandín como un fenómeno no competitivo sino integrador, que está modulado por el ambiente y produce respuestas acotadas, que acontece sobre el conjunto poblacional en vez de sobre el individuo aislado, y que no es consecuente con un patrón gradual y de ritmo constante, sino puntuado y con tendencia a crecer en complejidad. Además, la adaptación, la especiación y la generación de verdaderas novedades o apomorfías (que él denomina transformación), son aspectos desacoplados (aunque relacionados) de la modificación de las especies en el tiempo.

Mi propuesta personal consiste en una reformulación integral de la Biología Evolutiva a través de la integración de las ciencias de la complejidad con las ciencias biológicas bajo el paradigma sistémico para generar un nuevo catálogo de categorías, herramientas conceptuales y dinámicas concretas que amplían, potencian y dan consistencia al estudio de la evolución a través de un nuevo área de conocimiento que identifico como Biología Evolutiva de Sistemas. Por supuesto, esta propuesta toma como eje teórico el modelo de Máximo Sandín, al tiempo que explora nuevas fronteras, formaliza los términos y trata de unificar de manera no sólo coherente, sino inseparable, a buena parte de los fundamentos heterodoxos clásicos (predarwinistas y presintéticos) y de los nuevos retos de la biología del siglo XXI, en una alternativa potente a la síntesis moderna y al pensamiento darwinista. Por otro lado, recalco el uso de nuevas herramientas de biocomputación para el estudio de la Biología Evolutiva de Sistemas, y actualmente estoy trabajando en un modelo simulado que trata de reproducir mis propuestas más concretas en un escenario virtual. Y hasta aquí puedo leer.


17-En tu nuevo modelo teórico, ¿cuál sería el rol explicativo de la selección natural, de la deriva genética y que papel jugaría la genética de poblaciones?

Entiendo por selección natural aquellos fenómenos de supervivencia diferencial mediados por la competencia entre organismos por lo demás viables. Esta es una puntualización que sin duda no gustará a muchos darwinistas, dado que acota el poder adjudicado a este término, pero considero que esta es la innovación del concepto tal como lo concibió Darwin y sus precursores, dado que  la idea de una supervivencia acotada a lo largo de la historia de la biodiversidad precede con mucho a Darwin, y la verdadera innovación consiste en la idea de que la competencia es lo que lleva a la selección. Esto excluye a todos aquellos fenómenos de restricción que juegan con la viabilidad en términos absolutos de los organismos, ya sean de corte ecológico (coherencia ecositémica) o embriológico (constricciones del desarrollo). Para que se pudiera dar un fenómeno de este tipo, sería necesario contar con un escenario en el que existiesen unos umbrales de competencia suficientemente altos como para llevar a la muerte o la no reproducción de algunos individuos en función de sus ligeras variaciones individuales. Existen varios estudios sobre redes ecológicas que reflejan justamente lo contrario, que los ecosistemas se autoorganizan evitando la competencia y la exclusión competitiva. No obstante, para que esta selección competitiva tuviera una continuidad temporal que lleve a la composición de las poblaciones, además de un elevado umbral de competencia, los individuos implicados deberían de sobrevivir en función de sus características y estas deberían de ser heredables fielmente con el fin de que no se altere la supuesta ventaja que otorgan (fidelidad de copia), dado que en este último supuesto no podría repetirse la selección a lo largo de suficientes generaciones como para llevar a una homogeneización por remplazo. Si consideramos los caracteres como elementos discretos, con expresión lineal y determinista, y sin posibilidad de influencia recíproca entre sí y con el medio, podemos mantener esta suposición como válida. Esto es lo que supone la síntesis moderna al fusionar el neodarwinismo con el mendelismo. Sin embargo, esta suposición no es sostenible a la luz de la genómica actual. Solo un bajo número de caracteres presentan segregaciones mendelianas (si no recuerdo mal, menos del 8% de las enfermedades humanas hereditarias, casos muy estudiados, entrarían en esta categoría), mientras que la expresión general de la información genética se realiza a través de redes complejas de interacción, en las cuales es fundamental el contexto genético y ambiental como conjunto. Esto sin contar con otros canales de información epigenética y ambiental, que de ningún modo pueden atribuirse a las segregaciones mendelianas, y a aquellos mecanismos de robustez que tienden a limitar las variaciones en torno a estados multifactoriales estables y bien definidos.

Por lo tanto, entiendo que el concepto de selección natural haría referencia a un fenómeno de reproducción y supervivencia diferencia mediada por competencia, siendo un caso muy particular de las restricciones al cambio evolutivo. Solo cuando los organismos reproductores deben su “éxito” a caracteres heredables e individuales de forma determinista y las condiciones de elevada competencia se mantienen durante suficiente tiempo, la selección competitiva podría (y remarco el condicional) tener un efecto homogeneizante en la población. En esencia, el papel de la selección natural, aunque teóricamente posible, tiende a cero en un escenario natural (ajeno a las predisposiciones de la experimentación en laboratorio).

Respecto a la deriva genética, este es un término que viene a incluir a todos aquellos fenómenos de cambio en la composición de las frecuencias alélicas de una población no producidas por selección, sino por sesgos de población indiscriminados. Es una definición por oposición y, por lo tanto, prefiero obviarla en mi análisis porque no aporta nada.

Ambos términos están en estrecha relación con la genética de poblaciones. Personalmente rechazo esta disciplina como base de la Biología Evolutiva y creo que aporta muchas más trabas que ayudas al estudio de la evolución. En un momento como el actual, en el cual trabajamos con redes genéticas y se nos escapa cuál es la unidad material de la información biológica, es bastante improductivo estudiar la distribución de polimorfismos genéticos y cómo estos varían con el tiempo. En vistas a lo anterior, no podemos establecer una causalidad directa entre el genotipo y el fenotipo, y, aún en los casos en los que es posible obtener cierta información, no salimos de una cuestión esencialmente demográfica, microevolutiva en el mejor de los casos, que nada tiene que ver con los cambios macroevolutivos patentes en el registro fósil y la genómica comparativa.


18-En los medios de comunicación se lee o escucha muchas veces que se ha descubierto el "gen de la homosexualidad", o el "gen del alcoholismo" el "gen de la creatividad", o el "gen de la infidelidad". Esto se basa en la idea del gen como una unidad discreta de información genética responsable de una característica particular, pero he leído que esta comprensión simplista sobre los genes está siendo puesta en duda los datos científicos más recientes. ¿Puedes comentarnos algo al respecto?.

Sí, así es. Las “ciencias de la información biológica” (genética, epigenética, genómica, etc.) están demoliendo literalmente las ideas clásicas de la herencia y la expresión de la información. Pese a ello, no son pocos los medios, e incluso las publicaciones científicas, que siguen haciendo uso de conceptos laxos o incoherentes, en especial en lo que se refiere a enfermedades y comportamientos humanos.

Por un lado, la información genética tiene una expresión y una estructura harto compleja que no se ajusta a las concepciones lineales y deterministas del siglo pasado. La composición de los genomas dista de ser una ristra de “genes” (secuencias delimitadas de DNA, que se expresan funcionalmente como proteínas y algunos RNA largos, y que actúan como unidades discretas de información), ordenadas una detrás de otra a lo largo de los cromosomas. De hecho las secuencias codificantes de proteínas, los tradicionalmente llamados “genes”, constituyen una fracción minoritarias de los genomas eucariotas (cerca del 2% del total en humanos, por ejemplo), al tiempo que existe una enorme homología y conservación entre estas secuencias a través de la filogenia que implican un papel secundario en la evolución de los genomas. Del mismo modo, el número de “genes” tampoco es indicativo de la complejidad final de los organismos (los seres humanos contamos con unas 25.000 de estas secuencias, mientras que la mosca de la fruta cuenta con unos 18.000 y el arroz más de 30.000). Esto nos lleva a pensar que existe mucha más información que la adjudicada a los “genes”. Además, estas secuencias distan de tener una expresión determinista y lineal, dado que la mayoría están sujetas a fenómenos de modificación postraduccional y postranscripcional, regulación por promotores alternativos, marcas de splicing y de poliadenilación, enhancers, etc., que dependen de las circunstancias del contexto celular y biológico. Del mismo modo, las secuencias codifiantes tampoco tienen unos límites físicos bien definidos, dado que los fenómenos de trans-splicing, quimerismo y solapamiento pueden empalmar facultativamente secuencias no necesariamente colindantes. Por último, es cada vez mas patente que existe una enorme diversidad de elementos sin codificación a proteínas que se expresan en forma de multitud de tipos de pequeños RNA con funciones reguladoras que se escapan a la definición de “gen” y que se encuentran incluidas dentro de las complejas redes de interacción genética que, insisto, son dependientes de los contextos genéticos y ambientales. Como consecuencia, no es posible establecer una relación lineal entre el “gen” y el carácter, mucho menos cuando estos son tan complejos como un comportamiento humano. Por supuesto la mayoría de los genetistas no comunica dicha relación actualmente (a diferencia de los medios), sino que hablan de una “predisposición genética”. Sin embargo, tal como decía un buen colega y tutor, en ausencia de un marco de referencia completo, se podría decir que los hombres tenemos predisposición genética a ser mujeres, pues tenemos un cromosoma X. Lo que intento decir es que la “predisposición” genética es una falacia en ausencia de un conocimiento completo de todas y cada una de las variables que se dan en un momento dado de la vida de un organismo.

Por otra parte, no podemos olvidarnos de que existen otros canales de información que interactúan con el nivel genético, los canales epigenético y ambiental. Por lo tanto, hablar de “genes de” me parece insostenible y contraproducente. Y en todo caso, visto lo visto, ¿qué es un gen, si es que es algo?

Este es un tema que sobre el que he escrito con algo más de extensión en mi artículo “El mito del gen: genética, epigenética y el bucle organismo-ambiente”, que incluyo en la bibliografía recomendada para aquellas personas que les interese ampliar sobre el mismo.

19-Ante las propuestas innovadoras de biológos como tú o Máximo Sandín, algunos  neo-darwinistas afirman que tales propuestas no refutan el papel esencial de la selección natural en la evolución, sino que únicamente amplían y enriquecen la fuentes posiles de variación genética. Por ejemplo, afirman ellos, un organismo o conjunto de organismos originados por una duplicación, o por una reorganización genómica, o por una transmisión horizontal de genes, o por simbiosis, deben en última instancia enfrentarse a la prueba decisiva de la selección natural o  "filtración" por parte del ambiente, que es lo que en definitiva va a determinar cuáles son los organismos que tendrán diferencialmente más éxito reproducitvo y por ende predominarán en una población, por lo que la selección natural seguiría siendo esencial en la explicación científica de la evolución. ¿Qué opinas de esta objeción?

Bueno, creo que he ido contestando a esta pregunta a lo largo de la entrevista. En vistas a los modelos teóricos que trabajamos, la selección natural no solo está mal definida y como término no aporta nada al estudio de la evolución, sino que es innecesaria (y en gran medida insostenible) en función a los mecanismos, procesos y dinámicas que introducimos.

20-Los críticos del darwinismo han analizado las posibles causas de la hegemonía de esa cosmovisión a la luz de factores socio-económicos y culturales. Ciertos críticos afirman que el darwinismo es, histórica e ideológicamente, un apéndice de la teoría económica del libre mercado, que tiende a apuntalar conceptos como los de "competencia" o "escasez de recursos", que son conceptos fundamentalmente económicos-empresariales, y que refuerzan las diferencias sociales dentro de una sociedad basada en ese modelo económico capitalista, justificando así a las clases poderosas o dominantes las cuáles serían, en la interpretación darwinista, las "más aptas". ¿Estás de acuerdo con esta opinión?

Si, estoy de acuerdo. Aunque entiendo que la relación es retrolimentada. El darwinismo se nutrió de las ideas de Malthus, Spencer, Adam Smith y Hobbes. Es una cadena de pensamiento, una cosmovisión común que, creo, queda sintetizada y convertida en ley natural a través del darwinismo. Esta cosmovisión no solo incluye el libre mercado, sino que engloba en general una idea de supremacía por derecho que permite el progreso de unos sujetos privilegiados a través de la degradación y la explotación del resto, en lo que perciben como una lucha natural de todos contra todos. Como decía, el darwinismo se fundó sobre esas ideas (tal como relata el propio Darwin y muchos historiadores modernos), aunque no cabe duda que inmediatamente el darwinismo se convirtió a su vez en una herramienta, una justificación científica, que apoyaba el nuevo orden de poder emergente que era el liberalismo económico de la época victoriana. En consecuencia, “El origen de las especies” tuvo una gran aceptación social (que no de los estamentos eclesiásticos ni del colectivo científico) agotándose rápidamente la primera edición. Pero además, el darwinismo fue promocionado a través del X-Club, la “más poderosa sociedad científica” de la época, cuyos integrantes eran altos cargos científicos partidarios del liberalismo, hasta el punto de fundar la revista “Nature” como púlpito del darwinismo.

Es bien conocido que desde su popularización, el darwinismo ha sido empleado como punta de lanza para llevar a cabo prácticas económicas de explotación laboral, y que grandes magnates como Rockefeller no tenían pudor en usar el darwinismo como una explicación natural a su privilegiada situación de poder y riqueza. Del mismo modo, el darwinismo permitió dar un enfoque científico, y por tanto justificable, a los prejuicios sociales y raciales. Es más, estableció un nuevo escenario temporal en el cual se volvía una “obligación moral” mejorar la especie humana mediante la dirección de la reproducción y la supervivencia de los grupos humanos. Esto es lo que Francis Galton, primo de Darwin, denominó como eugenesia. En mi opinión, la eugenesia ha sido el movimiento sociopolítico más turbio e influyente en la historia de la biología, y es imposible no ligar su desarrollo (una vez más retroalimentado) al darwinismo. La puesta en marcha de programas eugénicos para la reproducción concertada de los individuos “más virtuosos”, así como el aislamiento, la esterilización y el asesinato de los “lastres sociales” (a los ojos de los eugenistas, claro está) tuvo una repercusión en buena parte de los países occidentales hasta el final de la segunda guerra mundial, aunque sin duda la Alemania nazi lo llevo hasta el grado más alto en lo que se refiere a relevancia para el estado. La eugenesia fue el motor ideológico y económico detrás de buena parte del desarrollo de la genética clásica y de la síntesis moderna, y su expansión ha configurado, en mi opinión, toda la biología del siglo XX y los mitos sociales que han permeado hasta la sociedad, pasando por la defensa del mercado.

21-Otros críticos argumentan que, si bien los factores socio-económicos mencionados en la pregunta anterior explican la gran aceptación y receptividad que la obra de Darwin tuvo al comienzo, en la actualidad la hegemonía del darwinismo no puede explicarse en esa forma, entre otras cosas porque ya nadie emplea el darwinismo para justificar las diferencias entre las clases sociales, y porque la mayoría de biólogos darwinistas son progresistas, simpatizantes del socialismo y críticos del libre mercado. La hegemonía actual del darwinismo se explicaría mejor en términos de la lucha cultural occidental entre la religión y el secularismo. Según estos críticos, el darwinismo muestra que Dios no existe o cuya existencia es innecesaria y superflua. Y dado que esto es la voz de la "ciencia", entonces se tiene a mano el mejor argumento científico a favor del ateísmo y de una cosmovisión secular. Esta hipótesis, dicen estos críticos, tiene un gran poder para explicar lo siguiente: la tendencia de muchos darwinistas de exagerar tremendamente los poderes creativos de la selección natural elevándola casi al nivel de Dios (la selección natural sería el sustituto científico, natural y ateo del Dios creador del universo, cumpliendo así el rol de un mito secular); la obsesión de los darwinistas por interpretar cualquier crítica a la selección natural como una defensa del "creacionismo" (que es la reacción simplista propia de los miembros de una secta religiosa que se ponen inseguros y a la defensiva cuando su doctrina criticada), o la tendencia casi paranoide de ver a los críticos como "creacionistas encubiertos". También explicaría la distorsión histórica según la cuál fue Darwin quien ofreció por primera vez una explicación de la evolución en términos naturalistas (cuando en realidad la evolución se venía estudiando y tratando de explicar en forma naturalista desde hace casi 100 años antes). Y explicaría también la famosa y influyente frase de Richard Dawkins: "Aunque el ateísmo pudo ser sostenible en términos lógicos antes de Darwin, Darwin hizo posible ser un ateo realizado intelectualmente" (esta frase de Dawkins implica que, si la teoría de Darwin es falsa, la presunta sotenibilidad intelectual del ateísmo se derrumbaría, algo que comprensiblemente y como ocurre con cualquier creyente cuando le atacan su cosmovisión, los ateos estarán dispuestos a evitar a toda costa, lo que explicaría la hipersensibilidad que tienen a la crítica del darwinismo). ¿Qué opinión te merece esta segunda explicación alternativa de la hegemonía darwiniana?

Me parece una explicación forzada. En realidad el debate entre evolucionismo y creacionismo es una aberración histórica. Como otros han señalado anteriormente, la teología y la ciencia son dos dominios de pensamiento humano independientes. O al menos deberían de serlo.  El punto inicial de este enfrentamiento puede situarse en la polémica que desató el “Origen de las especies” en la jerarquía eclesiástica de Inglaterra. Hay que señalar que en aquella época y lugar no existía una separación clara entre ambos estamentos, y era frecuente que los cargos universitarios fueran al tiempo cargos eclesiásticos. Por supuesto, esta es una situación particular que no es equiparable con la actual. Entonces, ¿por qué continua este enfrentamiento?

Mi impresión es que los darwinistas hicieron acopio de una de las tácticas políticas más usadas de todos los tiempos: basar tu campaña en las deficiencias del adversario. Y con el tiempo, esta práctica se ha vuelto tan habitual que forma parte del “credo” darwinista hasta llevarlo a una situación dogmática. Por otra parte, resulta curioso como se ha ido incorporando este debate en un país como el nuestro, de larga tradición católica, en el que el evolucionismo y la religión parecen haber convivido sin demasiados problemas durante bastante tiempo.

Tachar a los críticos del darwinismo de “creacionistas encubiertos” es, a mi juicio, un mecanismo de defensa que inmediatamente convierte lo que no se entiende o no se comparte en una categoría tratable, reconocible y sobretodo, atacable. Desde el otro lado, los llamados “creacionistas” tratan de reforzar su fe entrando incluso en dominios que no siempre controlan, al tiempo que tratan de utilizar cualquier vacío (y hay muchos donde elegir) como una supuesta prueba de la necesidad de un poder superior. Aunque pueda parecer una relación equilibrada, lo cierto es que la fe es una decisión existencial y personal, y puede buscar soportes dónde sea dado que no obedece a normas estrictas del mismo modo que no requiere de pruebas fehacientes. Sin embargo, la ciencia debe de obedecer a una serie de normas epistemológicas que deberían de evitar que se cayera en discusiones, a mi parecer, tan absurdas como estas. En su casa que cada uno crea lo que quiera (si es que quiere creer en algo) pero   el ejercicio científico debería de centrarse únicamente en el conocimiento basado en la experiencia y en los hechos falsables.

22-¿Qué bibliografía y páginas web recomendarías a los estudiantes de biología y a lectores en general para que profundicen más en los temas discutidos en esta entrevista?

Recursos en la web:
- BiVOS. Grupo de Estudios en Teóricos en Biología Evolutiva de Sistemas: http://bivos.cooperativakatal.org/
- Somos bacterias y virus. Página personal de Máximo Sandín: http://somosbacteriasyvirus.com/
- Biología y pensamiento. Blog CSIC de Emilio Cervantes: http://www.madrimasd.org/blogs/biologia_pensamiento/
- Evolución y ambiente. Página del Instituto de Estudios de Evolución Humana: http://www.iieh.com/

En texto:
- Pensando la evolución, pensando la vida. Máximo Sandín 2006. Cauac.
- La crisis latente del darwininismo. Mauricio Abdalla, 2007. Cauac.
- La tautología darwinista. Fernando Vallejo, 2002. Taurus.
- Darwinism: the refutation of a Myth. Søren Løvtrup, 1987. Croom Helm.
-  Ecological Developmental Biology: Integrating Epigenetics, Medicine, and Evolution. Scott F. Gilbert y David Epel, 2009. Sinauer.
- Evolución: la increíble historia de una teoría científica. Edward Larson, 2006. Debate.
- El mito del gen: genética, epigenética y el bucle organismo-ambiente. Revista de medicina naturista.  Vol. 6, Nº 1, 2012 , págs. 42-49. http://dialnet.unirioja.es/servlet/articulo?codigo=3829210
- Modelos evolutivos predarwinistas. Andrés Galera, 2002. Arbor. Vol 172, No 677. http://arbor.revistas.csic.es/index.php/arbor/article/viewArticle/1067
- Lysenko La teoría materialista de la evolución en la URSS. Manuel Olarieta, 2012. Theoria. http://www.ucm.es/info/nomadas/trip/lysenko.html
- Todos los textos clásicos: Filosofía zoológica de Lamarck, el origen de la especies y el  Origen del hombre de Darwin, etc

23-¿Algo más que quieras añadir para finalizar la entrevista?

Solo agradecerte esta magnífica entrevista y animar a los lectores a seguir explorando estas y otras ideas por su cuenta. También les invito a que sigan las actividades y noticias de BiVOS a través de la web y de las redes sociales, así como a que contacten con el equipo coordinador para cualquier duda interés de participación.


[1]. He escrito “se le atribuye” con la constancia de que sus precursores (Edward Blyth, William Wells, Patrick Mathew o Herbert Spencer) ya habían explorado las mismas ideas con anterioridad, así como Alfred R. Wallace quien publicó un artículo previo al libro de Darwin y llegó a las mismas conclusiones de forma paralela. Del mismo modo, no he utilizado la palabra evolución en mi introducción al pensamiento de Darwin del mismo modo que él tampoco uso este término hasta la sexta edición del “Origen”.

Anexos:
  
-Artículo sobre el neo-darwinismo por Daniel Heredia, en este enlace.

-Video sobre el Manifiesto por una Biología del Siglo XXI aquí.