jueves, 11 de marzo de 2010

Fernando Sánchez Dragó, el libro tibetano de los muertos, las experiencias cercanas a la muerte y el miedo a morir



En el minuto 4:08, el escritor Fernando Sánchez Dragó (quien tuvo una experiencia similar a las experiencias cercanas a la muerte) responde a la pregunta ¿existe vida después de la muerte? afirmando que "Yo creo que no todo el mundo, cuando se muere, sobrevive"

Yo pienso que esta opinión es equivocada por varias razones:

1-La literatura de la "post-vida" o vida después de la muerte no se limita a las experiencias cercanas a la muerte, sino a muchas otras líneas de evidencia (por ejemplo, la mediumnidad física y por voz directa como la investigada por Arthur Findlay en el médium John Sloan) que son coherentes en afirmar que todos sobrevivimos.

2-Al parecer, la razón por la cuál es posible la supervivencia es que la conciencia (la experiencia subjetiva) no es reducible al cerebro físico (aunque esté conectado temporalmente a él durante nuestra existencia en la Tierra). Por tal motivo, la destrucción del cerebro en la muerte no implica la destrucción de la conciencia.

De allí que no sea probable que solamente sobrevivan unos y otros no, ya que eso supondría que solo algunos humanos son seres espirituales (no reducibles a las funciones cerebrales) mientras que otros humanos son meramente seres físicos, mecánicos, máquinas biológicas sin sustancia espiritual trascendente al cuerpo físico.

En contra de lo que dice Dragó en el minuto 4:29, el alma no es algo que se "construye", sino que existe como parte integrante de nuestra propia esencia. Somos almas, no las creamos (lo que sí podemos crear y perfeccionar son las cualidades y potenciales inherentes a nosotros, tales como la capacidad de amar, de perdonar, de ayudar al prójimo, de ser mejores en todos los aspectos, de darle el justo valor a las cosas, de desarrollarnos física, emocional y espiritualmente, etc.).

3-Hasta donde conozco, la evidencia parece sugerir que la reencarnación no ocurre en todo el mundo. En la mayoría de los casos, la evidencia parece indicar que las personas que reencarnan lo hacen cuando han sufrido una muerte violenta, aparentemente en un momento en que no debieron morir.

En todo caso, el examen conjunto de la evidencia de la post-vida indica que todos sobrevivimos (es decir, no nos extinguiremos con la muerte física), pero no todos reencarnamos. Los que no reencarnan, aparentemente, vivirán en un plano espiritual diferente al terrenal aunque similar en muchos aspectos a él (conocido como "mundo astral", "plano espiritual", etc. según diversas tradiciones. Una explicación de esto está en el libro de Arthur Findley "Al borde de lo etérico", y en muchos otros libros más)

En conclusión, la opinión de Dragó puede valer con respecto a la reencarnación, pero no con respecto a la superviviencia de la conciencia en general.

Pueden leer una entrevista de Fernando Sánchez Dragó sobre estos temas en esta página.

Hay una versión digital gratis del Libro Tibetano de los Muertos que puede descargarse aquí.